La mejor forma de vivir es entregando su vida a Dios, de hecho es la forma mas inteligente de vivir aunque es constante la lucha por mantenerse en esta disciplina, porque el ser humano que no vive rendido a la autoridad de Dios crea diversos ídolos esto puede ser algo o alguien, por ejemplo el dinero, la presión social, la aprobación social, la vanidad, las tendencias, el resentimiento, el orgullo o el temor, cada persona refleja a quien ha rendido su vida, por la forma de expresarse, tomar decisiones y encarar el futuro incierto.
Somos diseñados para adorar a Dios, somos afortunados cuando lo entendemos rápidamente y sometemos nuestros deseos pecaminosos a su autoridad, solo allí encontraremos libertad, del pecado, y de nosotros mismos porque decidimos obedecer a Dios sobre todas las cosas, además experimentaremos paz, ya que dejaremos de luchar por tener la razón y daremos paso al cumplimiento del propósito de Dios, estar en acuerdo con Dios nos permite ver la vida desde una perspectiva optimista y despreocupada, no porque no existan problemas y dificultades, sino porque confiamos en el poder de Dios y no en nuestras fuerzas y dejamos que Dios quite y dé con la esperanza y certeza de que actúa justamente y nos ama.
Job 22 :21-22 Vuelve ahora en amistad con él, y tendrás paz; Y por ello te vendrá bien. Toma ahora la ley de su boca, Y pon sus palabras en tu corazón. Finalmente cuando decides vivir consagrado a Dios puedes identificar el poder de Dios en todo lo que sucede alrededor, la abundancia, el reconocimiento, la salud, la estabilidad y también todos sus opuestos son escenarios perfectos para reconocer su autoridad, gloria, dominio , gracia y amor. La rendición a Dios es un acto voluntario y valiente, en una sola palabra es un acto “revolucionario”.
Alcanzada por su gracia
Sharon Sáenz.