Es común encontrar personas con buenas intenciones, liderando buenas causas pero no tienen motivos puros detrás de todo esto, porque buscan la aprobación de cierto público, aliviar sus culpas o convencer a Dios de que haciendo eso acumulan buenos puntos para entrar al cielo, entre otras razones.
Es por eso que estamos llamados como hijos de Dios a mantener una buena conducta todo el tiempo, no es solamente en temporadas como por ejemplo la navidad, y el resto del año nos olvidamos de la generosidad y la unión familiar, mantener una buena conducta no es fácil, pero con la ayuda del Espíritu Santo es posible, estamos rodeados de constante presión y evaluación, nuestras decisiones y reacciones son un tema de que hablar en la boca de aquellos que aún no tienen a Jesús como Señor y Salvador y algunos de ellos asumen que los cristianos no tienen problemas y cuando los ven atravesando dificultades son espectadores de primera fila, ellos siempre esperan que seamos un modelo a seguir, eso no quiere decir que van a dejar de criticarnos sin embargo hay una gran diferencia en todo este asunto de las buenas obras, los cristianos no hacemos buenas obras o mantenemos una buena conducta para ganarnos la vida eterna, mas bien, por gratitud y respeto a aquel que es Santo que por medio de su sacrificio en la cruz nos entrega salvación y vida eterna por gracia, nos concentramos por practicar las obras que agradan al Espíritu, estamos llamados a vivir en santidad, todo ello se traduce en actos de amor, adoración y servicio; vivir para aquel que murió y resucitó por nosotros
Usted debe entender que tiene una gran nube de testigos, empezando por los que viven en su casa, y el día del juicio, cuando seamos llamados al tribunal para dar cuenta de todo lo bueno y lo malo, ellos y usted comprobaran que todo habrá valido la pena, y una vida intachable aunque a veces se vuelve un poco mas difícil, y tiene pérdidas en lo terrenal, tiene grandes recompensas eternas, ser diferente, ser luz no lo hacemos para sentirnos superiores a otros, por el contrario, la motivación correcta es alumbrar con buenas obras a otros para que conozcan a Jesús y lleguen al Padre, ganar almas, conducirlos a Jesús que es el único camino, verdad y vida, es lo mejor que le puede pasar a un ser humano. Mateo 5 :16 Del mismo modo, procuren ustedes que su luz brille delante de la gente, para que, viendo el bien que ustedes hacen, todos alaben a su Padre que está en el cielo.