Estudio Biblico
“¡Dios mío, yo sé bien todo lo que has hecho, y por eso tiemblo en tu presencia!” Habacuc 3:2 (TLA)
Si quieres escuchar hablar a Dios, adora a Dios.
En otras palabras, agradécele por su presencia en tu vida y por estar interesado en los detalles de tu vida. Agradécele por contestar tus oraciones: “¡Dios mío, yo sé bien todo lo que has hecho, y por eso tiemblo en tu presencia!” Habacuc 3:2 (TLA). Dios te da una visión. Dios te da un sueño. Tú sabes lo que Dios quiere que hagas, así que ahora agradécele por contestar tu oración. Esa es una forma de adoración a Dios.
Es importante entender que no puedes escuchar a Dios hasta que conozcas a Dios, y hay tres niveles de conocimiento de Dios: reconocimiento, conocerlo y amistad. Puedes estar en el nivel de conocerlo; conoces que Dios existe, pero no lo conoces. O tal vez estás en el nivel de relación; conoces a Dios un poco, pero no lo conoces muy bien.
Dios quiere que vivas en el nivel de amistad. Él quiere ser tu amigo, y Él quiere que seas su amigo. Dios quiere que hables con Él todo el tiempo.