AMOR
El amor de los padres requiere sacrificio, autocontrol, atención, instrucción y corrección, con un enfoque particular en la conexión, lo que implica priorizar su agenda, enfocar su atención, tener paciencia ante las imperfecciones, dejar a sus hijos ser niños, y tener la disposición para jugar y reír.
RESPETO
El respeto se basa en el reconocimiento del valor dado por Dios que cada persona trae consigo a su familia. Se expresa a través de la paciencia, la comunicación intencional, la escucha atenta, el compromiso por resolver los problemas, la comprensión de la particularidad de cada uno, y los límites. También se muestra a través de palabras y afirmación, corrección amorosa, y respondedor en vez de reaccionar.
LIMITES
Establecer límites saludables requiere discernimiento, sabiduría y coraje. Los límites se implementan bien cuando hay disposición de enseñar, corregir, guiar, detener y poner en marcha de manera consistente lo que es más útil para su cónyuge, sus hijos y usted mismo. Los límites existen para enseñar y guiar en vez de alejar. También se ven a través de una vida de equilibrio, madurez y autocontrol. La Biblia enseña que los límites saludables son iguales a la libertad. (Salmos 119: 10 Yo te he buscado de todo corazón; ¡no dejes que me aparte de tus mandamientos!)
GRACIA Y PERDON
La gracia y el perdón son el pegamento necesario que evita que las imperfecciones destruyan las relaciones. Involucra ser capaz de dejar ir las cosas, y amar incluso cuando hay frustraciones y fracasos. Se ve en un "lo siento", en aprender de los errores y en la búsqueda realista del crecimiento en vez de la perfección. Requiere escuchar con la meta de conectar, comprender y construir o reconstruir la confianza.
GRATITUD
La gratitud es la habilidad de centrarse en lo que usted tiene, en lugar de lo que no tiene. Esto nos lleva a tener un corazón satisfecho que está libre y disponible para conectarse y escuchar. La gratitud se expresa a través de un agradecimiento genuino, y puede ayudar a usted a tener una perspectiva de que la crianza es una relación, no es un rol, y que la vida es un regalo, no un derecho. Además, provee al cerebro la flexibilidad suficiente para generar optimismo ante la adversidad.
ADAPTABILIDAD
La adaptabilidad requiere una valiente flexibilidad, cuidado personal, detenerse en el tiempo, creatividad, y estar dispuesto a dejar ir las cosas. Implica ajustarse a las circunstancias, situaciones y entornos que cambian constantemente. Involucra abrazar el hecho de que el estrés es parte de la vida y que se requiere manejarlo, en vez de evadirlo. La adaptabilidad es vista como la habilidad para escuchar, y responder de forma creativa y respetuosa a otras personas, opiniones e ideas.
INTENCIONALIDAD
La intencionalidad se demuestra a través de un compromiso emocional, físico, mental y espiritual por el crecimiento interior de la familia. Requiere una cantidad significativa de energía y concentración, e implica guiar, preparar, enseñar, atender, aprender, planificar y participar. Es una clara expresión del interés de los padres por las relaciones, la conexión y el crecimiento espiritual y personal.