Estudio Biblico
Todos los cambios que estamos viviendo nos ha llevado al conflicto, ¿Cómo están manejando los conflictos cuando todo está cambiando? Y eso es lo que queremos hablar.
Todos los integrantes de la familia, luchamos con la “fiebre de la cabina”, al punto que corremos el riesgo de sentirnos fastidiados por la cantidad de tiempo juntos.
Pasar tiempo en familia es bueno, pero pasar las 24 horas puede generar conflictos. Pueden oír esas voces: quien va a lavar la loza-quien hará la comida-quien hará el aseo, etc. En la mayoría de los casos familiares, no existía el 24/7, ya no hay tema de que hablar, y todo esto genera graves y serios conflictos.
Por eso, se hace imprescindible hablar, ¿Cómo enfrentar dichos conflictos?
I. ACEPTAR Y RECONOCER LAS DIFERENCIAS. Las diferencias son un regalo de Dios, aunque pertenecemos a la misma familia, cada integrante de la misma piensa-actúa-reacciona diferente. Así que en lugar de atacar las diferencias, acéptelas.
II. APRENDAN A DISTRIBUIRSE LAS TAREAS EN EL HOGAR. Cualquiera se cansa de atender los hijos los que haceres del hogar 24/7, eso causa agotamiento-estrés-cargas. Una manera de evitar este exceso de cargas es aprendiendo a compartir las cargas de los hijos-de los que haceres del hogar.
III. PROPICIEN ESPACIOS DONDE EN UN AMBIENTE CALIDO PUEDAN CONECTARSE COMO FAMILIA. Juegos de mesa-ver películas-hacer un asado, etc. Entre mas desconectados estén como familia mas conflictos enfrentarán.
IV. FOMENTEN TIEMPOS DE ORACION FAMILIAR.
Cuando un corazón se siente seguro, naturalmente se abrirá, y si nuestros corazones se abren lograremos manejar y solucionar mucho mejor nuestros conflictos.