Comentario de Matthew Henry | Deuteronomio 16:1-17 | 0 | 1659
Calificar

Comentario Deuteronomio 17:1-7. Los sacrificios deben ser perfectos—Muerte a los idólatras. –Controv - Deuteronomio 16:1-17

Estudio Biblico

Vv. 1—17. Aquí se repiten las leyes para las tres fiestas anuales; la de la pascua, la de pentecostés, la
de los tabernáculos o cabañas; y la ley general acerca de la asistencia de la gente. Nunca debe
olvidar el creyente su bajo estado de culpa y miseria, su liberación y el precio que costó al Redentor;
que la gratitud y el gozo del Señor puedan mezclarse con el pesar por el pecado, y la paciencia bajo
las tribulaciones en su camino al reino del cielo. —Los creyentes deben regocijarse en lo que reciben
de Dios, y en lo que devuelven en sacrificio y servicio para Él; nuestro deber tiene que ser nuestro
deleite y nuestro gozo. —Si quienes estaban bajo la ley debían regocijarse ante Dios, cuánto más
nosotros que estamos bajo la gracia del evangelio; lo que hace que nuestro deber sea regocijarnos
más, regocijarnos siempre en el Señor. Cuando nos regocijamos en Dios, debemos hacer lo que
podamos por ayudar a los demás a que también se regocijen en Él, consolando a los dolientes y
dándole a los necesitados. Todos los que hacen de Dios su gozo, pueden regocijarse con esperanza,
pues es fiel quien lo ha prometido.

TE PUEDE INTERESAR

PASAJE BIBLICO

Deuteronomio 16
16:1 Guardarás el mes de Abib, y harás pascua a Jehová tu Dios; porque en el mes de Abib te sacó Jehová tu Dios de Egipto, de noche.

16:2 Y sacrificarás la pascua a Jehová tu Dios, de las ovejas y de las vacas, en el lugar que Jehová escogiere para que habite allí su nombre.

16:3 No comerás con ella pan con levadura; siete días comerás con ella pan sin levadura, pan de aflicción, porque aprisa saliste de tierra de Egipto; para que todos los días de tu vida te acuerdes del día en que saliste de la tierra de Egipto.

16:4 Y no se verá levadura contigo en todo tu territorio por siete días; y de la carne que matares en la tarde del primer día, no quedará hasta la mañana.

16:5 No podrás sacrificar la pascua en cualquiera de las ciudades que Jehová tu Dios te da;

16:6 sino en el lugar que Jehová tu Dios escogiere para que habite allí su nombre, sacrificarás la pascua por la tarde a la puesta del sol, a la hora que saliste de Egipto.

16:7 Y la asarás y comerás en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido; y por la mañana regresarás y volverás a tu habitación.

16:8 Seis días comerás pan sin levadura, y el séptimo día será fiesta solemne a Jehová tu Dios; no trabajarás en él.

16:9 Siete semanas contarás; desde que comenzare a meterse la hoz en las mieses comenzarás a contar las siete semanas.

16:10 Y harás la fiesta solemne de las semanas a Jehová tu Dios; de la abundancia voluntaria de tu mano será lo que dieres, según Jehová tu Dios te hubiere bendecido.

16:11 Y te alegrarás delante de Jehová tu Dios, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, el levita que habitare en tus ciudades, y el extranjero, el huérfano y la viuda que estuvieren en medio de ti, en el lugar que Jehová tu Dios hubiere escogido para poner allí su nombre.

16:12 Y acuérdate de que fuiste siervo en Egipto; por tanto, guardarás y cumplirás estos estatutos.

16:13 La fiesta solemne de los tabernáculos harás por siete días, cuando hayas hecho la cosecha de tu era y de tu lagar.

16:14 Y te alegrarás en tus fiestas solemnes, tú, tu hijo, tu hija, tu siervo, tu sierva, y el levita, el extranjero, el huérfano y la viuda que viven en tus poblaciones.

16:15 Siete días celebrarás fiesta solemne a Jehová tu Dios en el lugar que Jehová escogiere; porque te habrá bendecido Jehová tu Dios en todos tus frutos, y en toda la obra de tus manos, y estarás verdaderamente alegre.

16:16 Tres veces cada año aparecerá todo varón tuyo delante de Jehová tu Dios en el lugar que él escogiere: en la fiesta solemne de los panes sin levadura, y en la fiesta solemne de las semanas, y en la fiesta solemne de los tabernáculos. Y ninguno se presentará delante de Jehová con las manos vacías;

16:17 cada uno con la ofrenda de su mano, conforme a la bendición que Jehová tu Dios te hubiere dado.

SIGUENOS EN REDES SOCIALES