A la edad de dieciséis años, Ismael se encontró abandonado en el desierto confundido, rechazado, sin agua ni comida. Nació y se crió en la relación disfuncional entre su madre y Abraham y Sara. Estaba pagando el precio de la lucha y la división en la familia de la que no era responsable y no podía controlar, lidiando con las consecuencias de sus malas decisiones. Expulsado de su hogar ya punto de morir, el clamor de este joven fue escuchado por Dios, quien no solo lo salvó a él ya su madre, sino que prometió hacer de Ismael una gran nación.
Dios nos estaba mostrando que Él sabe cómo sacar grandeza de un gran desorden. Puede que hayas tenido un comienzo difícil, las probabilidades han estado en tu contra, pero Dios te está cuidando. Él sabe lo que no conseguiste. Él sabe quién no estuvo en tu vida. Conoce el dolor, la traición y el dolor. Llama a Él. Él tiene un plan para hacer más de tu vida de lo que jamás imaginaste.
Vv. 14—21. Si Agar e Ismael se hubieran comportado bien en la familia de Abraham, hubierancontinuado ahí pero fueron justamente castigados. Nosotros perdemos los privilegios por abusar deellos. Los que no saben cuándo están bien, conocerán el valor de las misericordias cuando les faltan.—Ellos fueron llevados a la angustia en el desierto. No se dice que se acabaran las provisiones nique Abraham los echara sin dinero. Pero se acabó el agua y, habiendo perdido su camino, en eseclima cálido, Ismael... Ver Mas
Dios escuchó llorar al muchacho, y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo: “Agar, ¿qué pasa? ¡No tengas miedo! Dios ha oído llorar al muchacho, allí tendido en el suelo”. GÉNESIS 21:17Has llorado alguna vez tan fuerte que no pudiste ver la ayuda que tenías delante de ti? Agar sabía lo que era eso. La rivalidad entre Sara y Agar llegó a ser tan intensa que Sara exigió que Agar e Ismael fueran echados del campamento. Abraham envió a Agar y a Ismael al desierto. Hacía mucho ca... Ver Mas
PASAJE BIBLICO
Genesis 21
21:17 Y oyó Dios la voz del muchacho; y el ángel de Dios llamó a Agar desde el cielo, y le dijo: ¿Qué tienes, Agar? No temas; porque Dios ha oído la voz del muchacho en donde está.