Una clave vital para aliviar el estrés - Marcos 8:34
Estudio Biblico
Marcos 8:34
Gastamos una gran cantidad de energía tratando de cuidarnos y obtener lo que queremos y necesitamos. Lo creas o no, esto es muy estresante. ¿Por qué? Porque Dios no nos ha diseñado para ser egoístas y centrados en nosotros mismos. Él quiere cuidarnos mientras nos enfocamos en ser una bendición para otras personas.
John Bunyan dijo: “No has vivido hoy hasta que hayas hecho algo por alguien que nunca te lo podrá pagar”. ¿Cuánto tiempo dedicas a pensar en lo que puedes hacer por otra persona? Podríamos decir: “Cuanto más, mejor”. En otras palabras, cuanto menos te centres en ti mismo y más te centres en los demás, más feliz serás.
La obsesión con uno mismo es un caldo de cultivo para el estrés, la presión y la ansiedad. Pero bendecir a alguien más y preocuparte por ti mismo al mismo tiempo es casi imposible. La Palabra de Dios está llena de instrucciones sobre cómo debemos tratar a los demás. Es hora de que comencemos a tomar estas directivas en serio, dándonos cuenta de que si Jesús menciona nuestro trato hacia los demás con tanta frecuencia, debe querer que le prestemos atención. La razón por la que hace hincapié en la forma en que nos relacionamos con otras personas es que quiere que disfrutemos de la vida que nos ha provisto, y sabe que nunca podremos hacerlo si estamos centrados en nosotros mismos.
Romanos 8:28 (NVI) dice que … sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados . Dios puede tomar incluso los dolores y las heridas que sufrimos y usarlos para bien en nuestras vidas. No durarán para siempre, y Él los usará para fortalecernos y para bendecir y ayudar a otros.
Dile a Dios lo que necesitas y quieres y luego déjalo en Sus manos mientras pasas tu tiempo bendiciendo a otros.
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