Números 13 cuenta la historia de cuando Moisés envió a los doce hombres a espiar la Tierra Prometida. Muchos de nosotros somos como los diez espías que regresaron y declararon que la tierra era fabulosa en todos los sentidos... excepto por los gigantes y las ciudades fortificadas que había allí. Tendemos a hacer lo que ellos también hicieron y compararnos con los gigantes que se paran frente a nuestros sueños y concluir que "somos como saltamontes a nuestra vista".
¿Te sientes como un saltamontes hoy? ¿Alguna vez siente que enfrenta un obstáculo tras otro, que no hay nada que pueda hacer para superarlo y que nunca funcionará? No tienes los recursos o las conexiones para cambiar lo que estás enfrentando o lograr tu sueño. ¿Estás comparando tus obstáculos actuales contigo mismo? Si es así, ¡es hora de parar!
El Salmo 78 dice que cuando los israelitas estaban en el desierto con la Tierra Prometida delante de ellos, "Probaron la paciencia de Dios y provocaron al Santo de Israel. No se acordaron de Su poder y de cómo los rescató de sus enemigos". Otras traducciones dicen "limitaron al Santo de Israel". No recordaban que Él era ilimitado. No se acordaron de que los redimió del Faraón con señales y prodigios en Egipto, ni que abrió el Mar Rojo para ellos y los hizo cruzar en seco. ¡No se acordaban! El salmista continúa diciendo que debido a que limitaron a Dios al no recordar sus obras, se volvieron atrás y le fueron infieles. La palabra "limitado" no se aplica a Dios, pero se aplica a lo que ellos mismos se ponen.
Eso me dice que aunque tú y yo tenemos el poder de poner límites a Dios, también tenemos el poder de romper nuestra propia mentalidad limitada. Si vamos a lograr las cosas que Dios quiere para nosotros, no podemos concentrarnos en nuestros obstáculos y reveses. Tenemos que ser decididos acerca de Su Palabra y poder. Tenemos que buscarlo diariamente por Su sabiduría, Su conocimiento, Su entendimiento y Su fuerza. Tenemos que recordar quién es Él y lo que ha hecho. Él es el Dios que nos ha rescatado en el pasado. Él es el Dios que divide nuestros Mares Rojos. Él es el Dios que saca agua de nuestras rocas. Es el Dios de lo imposible. Sus manos no están atadas y nunca estarán atadas. No te des la vuelta. Toma Sus manos y saca tu fuerza de tu Dios ilimitado. Todo lo que necesitas en esta vida se encuentra en Él.