¿Cómo perdemos nuestra identidad? - Genesis 25:24-28
Estudio Biblico
En ocasiones la perdida de nuestra identidad sucede en nuestra niñez. Sin embargo, en nuestro interior siempre ha habido un deseo por saber quiénes somos. Nuestros Padres pueden ser los responsables de nuestra pérdida de identidad. A veces, porque no aceptan lo que somos y quieren cambiarnos, otras veces porque quieren ayudar a Dios.
En nuestro personaje de hoy vemos que la crisis de identidad de Jacob inició desde su nacimiento (con su nombre, pues significa suplantador). Inicialmente su nombre debió haber sido Israel, que significa príncipe.
Su crisis de identidad también fue causada por su papá quien prefería notablemente a su primogénito Esaú por encima de Jacob. Rebeca, su mamá, quiso ayudar a Dios para que el propósito que Él tenía para Jacob se cumpliera.
La intención de Rebeca, como la de muchas mamás de ver realizado el propósito de Dios en sus hijos es buena, pero estorbó que el mismo Jacob descubriera su verdadera identidad y además le ocasionó muchos problemas, especialmente con su hermano.
En su afán de ayudarlo, Rebeca no solo le puso el nombre engañador sino que también lo convirtió en un engañador. Por lo tanto, cuando una mamá trata de ayudar a Dios, controlando y manipulando a su hijo, puede causar una crisis de identidad. El espíritu de control de una mamá puede incluso afectar la identidad sexual de sus hijos, ocasionando en ellos una posible tendencia hacia la homosexualidad.
Para reflexionar: ¿Existe la posibilidad de que tú mamá o tú papá pudieran haber ocasionado una crisis de identidad en tú vida?
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