“Canten su gratitud al Señor; al son del arpa, entonen alabanzas a nuestro Dios”. Salmo 147:7 (NTV)
Aprender a agradecer a Dios por lo que nos ha dado es una parte importante de nuestro viaje espiritual. Entonces, ¿cómo haces que la gratitud a Dios sea una parte integral de tu vida?
Una de las formas más importantes de hacerlo es cantando. La Biblia dice: “Canten su gratitud al Señor; al son del arpa, entonen alabanzas a nuestro Dios” Salmo 147:7 (NTV). Pocas cosas hacen que uno sea consciente de la presencia de Dios más rápidamente que cantar alabanzas a Dios. Y no importa cuánto talento musical tengamos. La Biblia nos insta a hacer un ruido alegre. ¡Incluso los cerdos hacen eso mientras comen! Si los cerdos pueden hacer un ruido alegre, nosotros también.
El cristianismo es una fe que canta. Hay más canciones sobre Jesucristo que sobre cualquier otra cosa o persona, incluso sobre el amor. Es por eso por lo que necesitas ser parte de una iglesia local. No se trata solo de escuchar un mensaje semanal de la Biblia. Al menos una vez a la semana, necesitas la expresión emocional que proviene de cantar nuestra gratitud a Dios. Sin ella, tu corazón se marchitará. No puedes ser un cristiano sano solo con sermones. Necesitas tanto la inspiración del mensaje como la expresión a través de la música.
He descubierto que los momentos en que menos tengo ganas de cantar, es cuando más necesito hacerlo. Cuando mi corazón está frío, necesito ser renovado, restaurado y recargado a través de la alabanza de gratitud a Dios. En mi apretada agenda, encuentro que escuchar música y cantar alabanzas a Dios renueva mi alma.
Así que pon tus canciones de adoración favoritas o encuentra una buena estación de radio cristiana y canta. Agradece a Dios por todo lo que te ha dado. Y haz un ruido alegre al Señor.
¿Cuáles son algunas de tus canciones de adoración favoritas? ¿Por qué te gustan?
¿Qué puede evitar que cantes durante los momentos de adoración privados y en la iglesia?
Compartir sobre un momento en que cantar alabanzas a Dios ayuda a levantar el ánimo.