Estudio Biblico
Dicen los especialistas que parte de la terapia de conseguir esa paz mental es reconocer que nuestra vida es lo que tenemos y nos toca trabajar a partir de lo que hay ahí.
Lo primero, que quiero que veamos es que Dios da una medida de prosperidad diferente a cada persona, de acuerdo a las capacidades de administrar de cada uno de nosotros. Vs 15.
Es por esta razón que no podemos estar comparándonos con otra persona. Siempre pasa: si Dios te bendice con algo, siempre va a haber alguien que tiene mucho más. Siempre va a haber alguien que tienen más, no importa lo que sea.
¿Qué significa esto? Si Dios te preguntara cuánto dinero necesitas para vivir feliz y para alcanzar tus sueños, todos tendríamos valores diferentes. ¿Porque?, porque Todos tenemos un concepto de prosperidad diferente. Lo que usted tiene que hacer es decirle a Dios, Señor ¿Cuál es el nivel de prosperidad que tienes para mí?
Lo segundo, que quiero que veamos es que tenemos que tener una visión para que pueda haber provisión. Visión=provisión. Visión es una imagen mental de lo que queremos llegar a ser y a tener en unos años. Noten la escasa visión que tenía el 3 siervo y fue por esto que aún lo poco que tenia se lo quitaron. Para que los proyectos sean realizables necesitan de una visión. Si Dios nos preguntara ¿Cuánto dinero necesitas? Y ¿para qué lo necesitas? ¿Qué le responderíamos? Y te digo algo a Dios le podemos decir exactamente lo que necesitamos.
Lo tercero y último, que quiero hablarles es que tienes que esforzarte por realizar tus proyectos. Los dos primeros siervos fueron y negociaron sus talentos en cambio el 3 hizo lo más fácil ir y esconderlo. Y cuando el Señor lo reprendió le dijo: “¡Siervo perverso y perezoso!”
Para reflexionar: ¿Estás trabajando partiendo de los que tienes hoy? O ¿Te quejas por lo que no tienes?
25:15 A uno dio cinco talentos, y a otro dos, y a otro uno, a cada uno conforme a su capacidad; y luego se fue lejos.
25:16 Y el que había recibido cinco talentos fue y negoció con ellos, y ganó otros cinco talentos
25:17 Asimismo el que había recibido dos, ganó también otros dos.
25:18 Pero el que había recibido uno fue y cavó en la tierra, y escondió el dinero de su señor.
25:19 Después de mucho tiempo vino el señor de aquellos siervos, y arregló cuentas con ellos.
25:20 Y llegando el que había recibido cinco talentos, trajo otros cinco talentos, diciendo: Señor, cinco talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros cinco talentos sobre ellos.
25:21 Y su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.
25:22 Llegando también el que había recibido dos talentos, dijo: Señor, dos talentos me entregaste; aquí tienes, he ganado otros dos talentos sobre ellos.
25:23 Su señor le dijo: Bien, buen siervo y fiel; sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor.
25:24 Pero llegando también el que había recibido un talento, dijo: Señor, te conocía que eres hombre duro, que siegas donde no sembraste y recoges donde no esparciste;
25:25 por lo cual tuve miedo, y fui y escondí tu talento en la tierra; aquí tienes lo que es tuyo.
25:26 Respondiendo su señor, le dijo: Siervo malo y negligente, sabías que siego donde no sembré, y que recojo donde no esparcí.
25:27 Por tanto, debías haber dado mi dinero a los banqueros, y al venir yo, hubiera recibido lo que es mío con los intereses.
25:28 Quitadle, pues, el talento, y dadlo al que tiene diez talentos.
25:29 Porque al que tiene, le será dado, y tendrá más; y al que no tiene, aun lo que tiene le será quitado.