Deuteronomio 8: 10-11, NVICuando hayas comido y estés satisfecho, alaba al SEÑOR tu Dios por la buena tierra que te ha dado. Cuídate de no olvidar al SEÑOR tu Dios ...En Deuteronomio 8, después de prometerles a los israelitas que los llevaría a la Tierra Prometida, una tierra llena de abundancia, favor y bendición, Dios les advirtió que no olvidaran que Él era la fuente. Dios estaba diciendo: "Cuando obtengas ese ascenso, cuando tu salud cambie, cuando tengas esa casa que me pediste, nunca olvid... Ver Mas
Alguna vez has logrado algo importante, algo que te costó, que la sudaste, pero después de un tiempo perdiste lo que lograste? Y esto frecuentemente nos pasa: nos esforzamos por construir algo, invertimos, sacrificamos cosas; pero como no lo cuidamos lo perdemos. Tal vez, estabas logrando cierto éxito en tú trabajo, en tu empresa; y de repente, lo descuidas y pierdes lo que tanto tiempo te había tomado construir. algunos dicen: que es más peligroso el éxito que el fracaso. P... Ver Mas
La Biblia debe ser el plato fuerte de nuestra dieta literaria. Si en lugar de pasar tanto tiempo en la mesa, lo pasáramos ocupados en la Palabra de Dios, nuestro espíritu y nuestro carácter serían fortalecidos y estarían florecientes. No importa cuáles sean nuestras circunstancias, experimentaremos gozo interior. La satisfacción que se deriva de tener una vida de obediencia no se tiene sin la Biblia.En la Palabra de Dios encontramos la manera como piensa el Señor, y lo que Él hace. También descu... Ver Mas
¿Es usted un buen oyente? Saber escuchar es una cualidad muy necesaria en toda relación, incluso en nuestra comunión con Dios. La mayoría de nosotros somos mejores hablando con Él que escuchándolo. Nos apresuramos a expresarle nuestras necesidades y peticiones, pero a veces tenemos tanta prisa que pasamos por alto el consultar su Palabra para ver lo que quiere decirnos.La triste verdad es que muchos cristianos preferirían no leer la Biblia antes que dejar de hacer cualquier otra cosa de su rutin... Ver Mas
PASAJE BIBLICO
Deuteronomio 8
8:1 Cuidaréis de poner por obra todo mandamiento que yo os ordeno hoy, para que viváis, y seáis multiplicados, y entréis y poseáis la tierra que Jehová prometió con juramento a vuestros padres.
8:2 Y te acordarás de todo el camino por donde te ha traído Jehová tu Dios estos cuarenta años en el desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar o no sus mandamientos.
8:3 Y te afligió, y te hizo tener hambre, y te sustentó con maná, comida que no conocías tú, ni tus padres la habían conocido, para hacerte saber que no sólo de pan vivirá el hombre, mas de todo lo que sale de la boca de Jehová vivirá el hombre.
8:4 Tu vestido nunca se envejeció sobre ti, ni el pie se te ha hinchado en estos cuarenta años.
8:5 Reconoce asimismo en tu corazón, que como castiga el hombre a su hijo, así Jehová tu Dios te castiga.
8:6 Guardarás, pues, los mandamientos de Jehová tu Dios, andando en sus caminos, y temiéndole.
8:7 Porque Jehová tu Dios te introduce en la buena tierra, tierra de arroyos, de aguas, de fuentes y de manantiales, que brotan en vegas y montes;
8:8 tierra de trigo y cebada, de vides, higueras y granados; tierra de olivos, de aceite y de miel;
8:9 tierra en la cual no comerás el pan con escasez, ni te faltará nada en ella; tierra cuyas piedras son hierro, y de cuyos montes sacarás cobre.
8:10 Y comerás y te saciarás, y bendecirás a Jehová tu Dios por la buena tierra que te habrá dado.
8:11 Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios, para cumplir sus mandamientos, sus decretos y sus estatutos que yo te ordeno hoy;