salmos 145 :20 Siempre estás pendiente de todos los que te aman, pero destruyes a los malvados.
Podríamos escribir un libro de muchas paginas tan solo haciendo memoria de todas las veces que Dios ha guardado nuestras vidas del peligro, sin contar todas la veces que no nos dimos cuenta de que estábamos bajo sombra de muerte y Él nos brindó su protección. Y la condición para gozar del cumplimiento de esta promesa es Amar a Dios, un amor genuino, un amor tierno, un amor respetuoso, un amor que confía aunque la situación sea muy difícil. Salmos 8 :4 dice : ¿Qué es el hombre, para que de él te acuerdes, Y el hijo del hombre, para que cuides de él? Dios nos cuida, esta pendiente de nosotros, nos toma en cuenta, hace memoria del ser humano, piensa y se acuerda de nosotros dice en otras versiones del mismo pasaje; es realmente un privilegio gozar de tan gigantesco beneficio, que el creador del universo este pendiente de los que le aman.
Por eso es tan importante testificar y expresar gratitud a Dios por ello, así como nos sentimos confortados al escuchar la historia de Jose en Egipto, de Daniel, y de muchos otros que vivieron diversos peligros pero Dios les dio en abundancia su respaldo y protección, es igual de significativo cuando expresamos dando gloria Dios por su cuidado nuestras experiencias ante nuestros hermanos en Cristo , pero principalmente dentro de nuestro hogar, con nuestro cónyuge e hijos.