dar buenos frutos Juan 15:8 - Juan 15:8
Estudio Biblico
Nuestras vidas no nos son dadas para que las desperdiciemos. Dios desea que demos buenos frutos regularmente. Hacer el bien, ser creativo, ayudar a los demás, lograr metas y otras cosas por el estilo me da una sensación de logro, y debo admitir que se siente muy bien. Por otro lado, cuando pierdo un día sin hacer nada, compadeciéndome de mí mismo, enojado o perezoso, eso no se siente bien.
No estoy sugiriendo que debamos pasar todo el tiempo trabajando, pero debemos ser productivos de manera regular. Orar por los demás a medida que avanzamos en nuestro día es productivo. Ser amable y animar a los demás es una forma sencilla de dar buenos frutos.
Recuerdo que una vez, hace varios años, fui a visitar a mi madre al hospital, y cuando llegué, una mujer joven estaba en su habitación haciéndole una prueba del corazón. Tenía una piel y un cabello hermosos y una hermosa sonrisa. Ella también fue muy amable. En lugar de solo pensar en estas cosas, le dije que era muy bonita. La expresión de su rostro me hizo saber que no lo escuchaba con la suficiente frecuencia y que la hacía sentir muy bien.
Es fácil enfocarse en los defectos de las personas y pasar totalmente por alto las cosas buenas que tienen, pero no tenemos que ser así si nos proponemos dar buenos frutos haciendo un gran escándalo por cada cosa buena que notamos en las personas. Tú y yo tenemos el poder de hacer que el día de otra persona sea increíble al ser la voz de Dios y permitirles escuchar a través de nosotros las cosas buenas que Él ve en ellos. Haz de hoy y de cada día un día especial dando buenos frutos que honren a Dios.
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