Estudio Biblico
2:20 pues a ninguno tengo del mismo ánimo, y que tan sinceramente se interese por vosotros.
2:21 Porque todos buscan lo suyo propio, no lo que es de Cristo Jesús.
2:22 Pero ya conocéis los méritos de él, que como hijo a padre ha servido conmigo en el evangelio.
2:23 Así que a éste espero enviaros, luego que yo vea cómo van mis asuntos;
2:24 y confío en el Señor que yo también iré pronto a vosotros.
2:25 Mas tuve por necesario enviaros a Epafrodito, mi hermano y colaborador y compañero de milicia, vuestro mensajero, y ministrador de mis necesidades;
2:26 porque él tenía gran deseo de veros a todos vosotros, y gravemente se angustió porque habíais oído que había enfermado.
2:27 Pues en verdad estuvo enfermo, a punto de morir; pero Dios tuvo misericordia de él, y no solamente de él, sino también de mí, para que yo no tuviese tristeza sobre tristeza.
2:28 Así que le envío con mayor solicitud, para que al verle de nuevo, os gocéis, y yo esté con menos tristeza.
2:29 Recibidle, pues, en el Señor, con todo gozo, y tened en estima a los que son como él;
2:30 porque por la obra de Cristo estuvo próximo a la muerte, exponiendo su vida para suplir lo que faltaba en vuestro servicio por mí.