Palabra Clave: obrero
Se han encontrado 17 versículos que contiene la palabra obrero
1 Cronicas 22:15. Tú tienes contigo muchos obreros, canteros, albañiles, carpinteros, y todo hombre experto en toda obra.
Ezequiel 27:9. Los ancianos de Gebal y sus más hábiles obreros calafateaban tus junturas; todas las naves del mar y los remeros de ellas fueron a ti para negociar, para participar de tus negocios.
Mateo 9:37. Entonces dijo a sus discípulos: A la verdad la mies es mucha, mas los obreros pocos.
Mateo 9:38. Rogad, pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.
Mateo 10:10. ni de alforja para el camino, ni de dos túnicas, ni de calzado, ni de bordón; porque el obrero es digno de su alimento.
Mateo 20:1. Porque el reino de los cielos es semejante a un hombre, padre de familia, que salió por la mañana a contratar obreros para su viña.
Mateo 20:2. Y habiendo convenido con los obreros en un denario al día, los envió a su viña.
Mateo 20:8. Cuando llegó la noche, el señor de la viña dijo a su mayordomo: Llama a los obreros y págales el jornal, comenzando desde los postreros hasta los primeros.
Lucas 10:2. Y les decía: La mies a la verdad es mucha, mas los obreros pocos; por tanto, rogad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies.
Lucas 10:7. Y posad en aquella misma casa, comiendo y bebiendo lo que os den; porque el obrero es digno de su salario. No os paséis de casa en casa.
Hechos 19:25. a los cuales, reunidos con los obreros del mismo oficio, dijo: Varones, sabéis que de este oficio obtenemos nuestra riqueza;
2 Corintios 11:13. Porque éstos son falsos apóstoles, obreros fraudulentos, que se disfrazan como apóstoles de Cristo.
Filipenses 3:2. Guardaos de los perros, guardaos de los malos obreros, guardaos de los mutiladores del cuerpo.
1 Timoteo 5:18. Pues la Escritura dice: No pondrás bozal al buey que trilla; y: Digno es el obrero de su salario.
2 Timoteo 2:13. Si fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo. Un obrero aprobado
2 Timoteo 2:15. Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad.
Santiago 5:4. He aquí, clama el jornal de los obreros que han cosechado vuestras tierras, el cual por engaño no les ha sido pagado por vosotros; y los clamores de los que habían segado han entrado en los oídos del Señor de los ejércitos.