Palabra Clave: cielos

Se han encontrado 342 versículos que contiene la palabra cielos

Genesis 1:1. En el principio creó Dios los cielos y la tierra.
Genesis 1:8. Y llamó Dios a la expansión Cielos. Y fue la tarde y la mañana el día segundo.
Genesis 1:9. Dijo también Dios: Júntense las aguas que están debajo de los cielos en un lugar, y descúbrase lo seco. Y fue así.
Genesis 1:14. Dijo luego Dios: Haya lumbreras en la expansión de los cielos para separar el día de la noche; y sirvan de señales para las estaciones, para días y años,
Genesis 1:15. y sean por lumbreras en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra. Y fue así.
Genesis 1:17. Y las puso Dios en la expansión de los cielos para alumbrar sobre la tierra,
Genesis 1:20. Dijo Dios: Produzcan las aguas seres vivientes, y aves que vuelen sobre la tierra, en la abierta expansión de los cielos.
Genesis 1:26. Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal que se arrastra sobre la tierra.
Genesis 1:28. Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra.
Genesis 1:30. Y a toda bestia de la tierra, y a todas las aves de los cielos, y a todo lo que se arrastra sobre la tierra, en que hay vida, toda planta verde les será para comer. Y fue así.
Genesis 2:1. Fueron, pues, acabados los cielos y la tierra, y todo el ejército de ellos.
Genesis 2:4. Estos son los orígenes de los cielos y de la tierra cuando fueron creados, el día que Jehová Dios hizo la tierra y los cielos,
Genesis 2:19. Jehová Dios formó, pues, de la tierra toda bestia del campo, y toda ave de los cielos, y las trajo a Adán para que viese cómo las había de llamar; y todo lo que Adán llamó a los animales vivientes, ese es su nombre.
Genesis 2:20. Y puso Adán nombre a toda bestia y ave de los cielos y a todo ganado del campo; mas para Adán no se halló ayuda idónea para él.
Genesis 7:3. También de las aves de los cielos, siete parejas, macho y hembra, para conservar viva la especie sobre la faz de la tierra.
Genesis 7:11. El año seiscientos de la vida de Noé, en el mes segundo, a los diecisiete días del mes, aquel día fueron rotas todas las fuentes del grande abismo, y las cataratas de los cielos fueron abiertas,
Genesis 7:19. Y las aguas subieron mucho sobre la tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos, fueron cubiertos.
Genesis 8:2. Y se cerraron las fuentes del abismo y las cataratas de los cielos; y la lluvia de los cielos fue detenida.
Genesis 9:2. El temor y el miedo de vosotros estarán sobre todo animal de la tierra, y sobre toda ave de los cielos, en todo lo que se mueva sobre la tierra, y en todos los peces del mar; en vuestra mano son entregados.
Genesis 14:19. y le bendijo, diciendo: Bendito sea Abram del Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra;
Genesis 14:22. Y respondió Abram al rey de Sodoma: He alzado mi mano a Jehová Dios Altísimo, creador de los cielos y de la tierra,
Genesis 15:5. Y lo llevó fuera, y le dijo: Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: Así será tu descendencia.
Genesis 19:24. Entonces Jehová hizo llover sobre Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego de parte de Jehová desde los cielos;
Genesis 24:3. y te juramentaré por Jehová, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no tomarás para mi hijo mujer de las hijas de los cananeos, entre los cuales yo habito;
Genesis 24:7. Jehová, Dios de los cielos, que me tomó de la casa de mi padre y de la tierra de mi parentela, y me habló y me juró, diciendo: A tu descendencia daré esta tierra; él enviará su ángel delante de ti, y tú traerás de allá mujer para mi hijo.
Genesis 27:39. Entonces Isaac su padre habló y le dijo: He aquí, será tu habitación en grosuras de la tierra, Y del rocío de los cielos de arriba;
Genesis 49:25. Por el Dios de tu padre, el cual te ayudará, Por el Dios Omnipotente, el cual te bendecirá Con bendiciones de los cielos de arriba, Con bendiciones del abismo que está abajo, Con bendiciones de los pechos y del vientre.
Exodo 20:11. Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, el mar, y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día; por tanto, Jehová bendijo el día de reposo y lo santificó.
Exodo 31:17. Señal es para siempre entre mí y los hijos de Israel; porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, y en el séptimo día cesó y reposó.
Deuteronomio 4:11. y os acercasteis y os pusisteis al pie del monte; y el monte ardía en fuego hasta en medio de los cielos con tinieblas, nube y oscuridad;
Deuteronomio 4:19. No sea que alces tus ojos al cielo, y viendo el sol y la luna y las estrellas, y todo el ejército del cielo, seas impulsado, y te inclines a ellos y les sirvas; porque Jehová tu Dios los ha concedido a todos los pueblos debajo de todos los cielos.
Deuteronomio 4:36. Desde los cielos te hizo oír su voz, para enseñarte; y sobre la tierra te mostró su gran fuego, y has oído sus palabras de en medio del fuego.
Deuteronomio 5:8. No harás para ti escultura, ni imagen alguna de cosa que está arriba en los cielos, ni abajo en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
Deuteronomio 10:14. He aquí, de Jehová tu Dios son los cielos, y los cielos de los cielos, la tierra, y todas las cosas que hay en ella.
Deuteronomio 11:17. y se encienda el furor de Jehová sobre vosotros, y cierre los cielos, y no haya lluvia, ni la tierra dé su fruto, y perezcáis pronto de la buena tierra que os da Jehová.
Deuteronomio 11:21. para que sean vuestros días, y los días de vuestros hijos, tan numerosos sobre la tierra que Jehová juró a vuestros padres que les había de dar, como los días de los cielos sobre la tierra.
Deuteronomio 28:23. Y los cielos que están sobre tu cabeza serán de bronce, y la tierra que está debajo de ti, de hierro.
Deuteronomio 28:24. Dará Jehová por lluvia a tu tierra polvo y ceniza; de los cielos descenderán sobre ti hasta que perezcas.
Deuteronomio 30:19. A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia;
Deuteronomio 31:28. Congregad a mí todos los ancianos de vuestras tribus, y a vuestros oficiales, y hablaré en sus oídos estas palabras, y llamaré por testigos contra ellos a los cielos y a la tierra.
Deuteronomio 32:1. Escuchad, cielos, y hablaré; Y oiga la tierra los dichos de mi boca.
Deuteronomio 32:40. Porque yo alzaré a los cielos mi mano, Y diré: Vivo yo para siempre,
Deuteronomio 33:13. A José dijo: Bendita de Jehová sea tu tierra, Con lo mejor de los cielos, con el rocío, Y con el abismo que está abajo.
Deuteronomio 33:26. No hay como el Dios de Jesurún, Quien cabalga sobre los cielos para tu ayuda, Y sobre las nubes con su grandeza.
Deuteronomio 33:28. E Israel habitará confiado, la fuente de Jacob habitará sola En tierra de grano y de vino; También sus cielos destilarán rocío.
Josue 2:11. Oyendo esto, ha desmayado nuestro corazón; ni ha quedado más aliento en hombre alguno por causa de vosotros, porque Jehová vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra.
Jueces 5:4. Cuando saliste de Seir, oh Jehová, Cuando te marchaste de los campos de Edom, La tierra tembló, y los cielos destilaron, Y las nubes gotearon aguas.
Jueces 5:20. Desde los cielos pelearon las estrellas; Desde sus órbitas pelearon contra Sísara.
1 Samuel 2:10. Delante de Jehová serán quebrantados sus adversarios, Y sobre ellos tronará desde los cielos; Jehová juzgará los confines de la tierra, Dará poder a su Rey, Y exaltará el poderío de su Ungido.
2 Samuel 22:8. La tierra fue conmovida, y tembló, Y se conmovieron los cimientos de los cielos; Se estremecieron, porque se indignó él.
2 Samuel 22:10. E inclinó los cielos, y descendió; Y había tinieblas debajo de sus pies.
2 Samuel 22:14. Y tronó desde los cielos Jehová, Y el Altísimo dio su voz;
1 Reyes 8:23. dijo: Jehová Dios de Israel, no hay Dios como tú, ni arriba en los cielos ni abajo en la tierra, que guardas el pacto y la misericordia a tus siervos, los que andan delante de ti con todo su corazón;
1 Reyes 8:27. Pero ¿es verdad que Dios morará sobre la tierra? He aquí que los cielos, los cielos de los cielos, no te pueden contener; ¿cuánto menos esta casa que yo he edificado?
1 Reyes 8:30. Oye, pues, la oración de tu siervo, y de tu pueblo Israel; cuando oren en este lugar, también tú lo oirás en el lugar de tu morada, en los cielos; escucha y perdona.
1 Reyes 8:34. tú oirás en los cielos, y perdonarás el pecado de tu pueblo Israel, y los volverás a la tierra que diste a sus padres.
1 Reyes 8:36. tú oirás en los cielos, y perdonarás el pecado de tus siervos y de tu pueblo Israel, enseñándoles el buen camino en que anden; y darás lluvias sobre tu tierra, la cual diste a tu pueblo por heredad.
1 Reyes 8:39. tú oirás en los cielos, en el lugar de tu morada, y perdonarás, y actuarás, y darás a cada uno conforme a sus caminos, cuyo corazón tú conoces (porque sólo tú conoces el corazón de todos los hijos de los hombres);
1 Reyes 8:43. tú oirás en los cielos, en el lugar de tu morada, y harás conforme a todo aquello por lo cual el extranjero hubiere clamado a ti, para que todos los pueblos de la tierra conozcan tu nombre y te teman, como tu pueblo Israel, y entiendan que tu nombre es invocado sobre esta casa que yo edifiqué.
1 Reyes 8:45. tú oirás en los cielos su oración y su súplica, y les harás justicia.
1 Reyes 8:49. tú oirás en los cielos, en el lugar de tu morada, su oración y su súplica, y les harás justicia.
1 Reyes 18:45. Y aconteció, estando en esto, que los cielos se oscurecieron con nubes y viento, y hubo una gran lluvia. Y subiendo Acab, vino a Jezreel.
1 Reyes 22:19. Entonces él dijo: Oye, pues, palabra de Jehová: Yo vi a Jehová sentado en su trono, y todo el ejército de los cielos estaba junto a él, a su derecha y a su izquierda.
2 Reyes 17:16. Dejaron todos los mandamientos de Jehová su Dios, y se hicieron imágenes fundidas de dos becerros, y también imágenes de Asera, y adoraron a todo el ejército de los cielos, y sirvieron a Baal;
2 Reyes 21:3. Porque volvió a edificar los lugares altos que Ezequías su padre había derribado, y levantó altares a Baal, e hizo una imagen de Asera, como había hecho Acab rey de Israel; y adoró a todo el ejército de los cielos, y rindió culto a aquellas cosas.
2 Reyes 21:5. Y edificó altares para todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la casa de Jehová.
2 Reyes 23:4. Entonces mandó el rey al sumo sacerdote Hilcías, a los sacerdotes de segundo orden, y a los guardianes de la puerta, que sacasen del templo de Jehová todos los utensilios que habían sido hechos para Baal, para Asera y para todo el ejército de los cielos; y los quemó fuera de Jerusalén en el campo del Cedrón, e hizo llevar las cenizas de ellos a Bet-el.
2 Reyes 23:5. Y quitó a los sacerdotes idólatras que habían puesto los reyes de Judá para que quemasen incienso en los lugares altos en las ciudades de Judá, y en los alrededores de Jerusalén; y asimismo a los que quemaban incienso a Baal, al sol y a la luna, y a los signos del zodíaco, y a todo el ejército de los cielos.
1 Cronicas 16:26. Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos; Mas Jehová hizo los cielos.
1 Cronicas 16:31. Alégrense los cielos, y gócese la tierra, Y digan en las naciones: Jehová reina.
1 Cronicas 21:26. Y edificó allí David un altar a Jehová, en el que ofreció holocaustos y ofrendas de paz, e invocó a Jehová, quien le respondió por fuego desde los cielos en el altar del holocausto.
1 Cronicas 29:11. Tuya es, oh Jehová, la magnificencia y el poder, la gloria, la victoria y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son tuyas. Tuyo, oh Jehová, es el reino, y tú eres excelso sobre todos.
2 Cronicas 2:6. Mas ¿quién será capaz de edificarle casa, siendo que los cielos y los cielos de los cielos no pueden contenerlo? ¿quién, pues, soy yo, para que le edifique casa, sino tan sólo para quemar incienso delante de él?
2 Cronicas 2:12. Además decía Hiram: Bendito sea Jehová el Dios de Israel, que hizo los cielos y la tierra, y que dio al rey David un hijo sabio, entendido, cuerdo y prudente, que edifique casa a Jehová, y casa para su reino.
2 Cronicas 6:18. Mas ¿es verdad que Dios habitará con el hombre en la tierra? He aquí, los cielos y los cielos de los cielos no te pueden contener: ¿cuánto menos esta casa que he edificado?
2 Cronicas 6:21. Asimismo que oigas el ruego de tu siervo, y de tu pueblo Israel, cuando en este lugar hicieren oración, que tú oirás desde los cielos, desde el lugar de tu morada: que oigas y perdones.
2 Cronicas 6:23. tú oirás desde los cielos, y actuarás, y juzgarás a tus siervos, dando la paga al impío, haciéndole recaer su proceder sobre su cabeza, y justificando al justo al darle conforme a su justicia.
2 Cronicas 6:25. tú oirás desde los cielos, y perdonarás el pecado de tu pueblo Israel, y les harás volver a la tierra que diste a ellos y a sus padres.
2 Cronicas 6:26. Si los cielos se cerraren, y no hubiere lluvias por haber pecado contra ti, si oraren a ti hacia este lugar, y confesaren tu nombre, y se convirtieren de sus pecados, cuando los afligieres,
2 Cronicas 6:27. tú los oirás en los cielos, y perdonarás el pecado de tus siervos y de tu pueblo Israel, y les enseñarás el buen camino para que anden en él, y darás lluvia sobre tu tierra, que diste por heredad a tu pueblo.
2 Cronicas 6:30. Tú oirás desde los cielos, desde el lugar de tu morada, y perdonarás, y darás a cada uno conforme a sus caminos, habiendo conocido su corazón; porque solo tú conoces el corazón de los hijos de los hombres;
2 Cronicas 6:33. tú oirás desde los cielos, desde el lugar de tu morada, y harás conforme a todas las cosas por las cuales hubiere clamado a ti el extranjero; para que todos los pueblos de la tierra conozcan tu nombre, y te teman así como tu pueblo Israel, y sepan que tu nombre es invocado sobre esta casa que yo he edificado.
2 Cronicas 6:35. Tú oirás desde los cielos su oración y su ruego, y ampararás su causa.
2 Cronicas 6:39. tú oirás desde los cielos, desde el lugar de tu morada, su oración y su ruego, y ampararás su causa, y perdonarás a tu pueblo que pecó contra ti.
2 Cronicas 7:1. Cuando Salomón acabó de orar, descendió fuego de los cielos, y consumió el holocausto y las víctimas; y la gloria de Jehová llenó la casa.
2 Cronicas 7:13. Si yo cerrare los cielos, para que no haya lluvia, y si mandare a la langosta que consuma la tierra, o si enviare pestilencia a mi pueblo;
2 Cronicas 7:14. Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra.
2 Cronicas 18:18. Entonces él dijo: Oid pues palabra de Jehová: Yo he visto a Jehová sentado en su trono, y todo el ejército de los cielos estaba a su mano derecha y a su izquierda.
2 Cronicas 20:6. Y dijo: Jehová Dios de nuestros padres, ¿no eres tú Dios en los cielos, y te tienes dominio sobre todos los reinos de las naciones? ¿no está en tu mano tal fuerza y poder, que no hay quien te resista?
2 Cronicas 33:3. Porque él reedificó los lugares altos que Ezequías su padre había derribado, y levantó altares a los baales, e hizo imágenes de Asera, y adoró a todo el ejército de los cielos, y les rindió culto.
2 Cronicas 33:5. Edificó asimismo altares a todo el ejército de los cielos en los dos atrios de la casa de Jehová.
2 Cronicas 36:23. Así dice Ciro, rey de los persas: Jehová, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra; y él me ha encargado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá. Quien haya entre vosotros de todo su pueblo, sea Jehová su Dios sea con él, y suba.
Esdras 1:2. Así ha dicho Ciro rey de Persia: Jehová el Dios de los cielos me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá.
Esdras 5:12. Mas después que nuestros padres provocaron a ira al Dios de los cielos, él los entregó en mano de Nabucodonosor rey de Babilonia, caldeo, el cual destruyó esta casa y llevó cautivo al pueblo a Babilonia.
Nehemias 1:4. Cuando oí estas palabras me senté y lloré, e hice duelo por algunos días, y ayuné y oré delante del Dios de los cielos.
Nehemias 1:5. Y dije: Te ruego, oh Jehová, Dios de los cielos, fuerte, grande y temible, que guarda el pacto y la misericordia a los que le aman y guardan sus mandamientos;
Nehemias 1:9. pero si os volviereis a mí, y guardareis mis mandamientos, y los pusiereis por obra, aunque vuestra dispersión fuere hasta el extremo de los cielos, de allí os recogeré, y os traeré al lugar que escogí para hacer habitar allí mi nombre.
Nehemias 2:4. Me dijo el rey: ¿Qué cosa pides? Entonces oré al Dios de los cielos,
Nehemias 2:20. Y en respuesta les dije: El Dios de los cielos, él nos prosperará, y nosotros sus siervos nos levantaremos y edificaremos, porque vosotros no tenéis parte ni derecho ni memoria en Jerusalén.
Nehemias 9:6. Tú solo eres Jehová; tú hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, con todo su ejército, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo lo que hay en ellos; y tú vivificas todas estas cosas, y los ejércitos de los cielos te adoran.
Nehemias 9:27. Entonces los entregaste en mano de sus enemigos, los cuales los afligieron. Pero en el tiempo de su tribulación clamaron a ti, y tú desde los cielos los oíste; y según tu gran misericordia les enviaste libertadores para que los salvasen de mano de sus enemigos.
Nehemias 9:28. Pero una vez que tenían paz, volvían a hacer lo malo delante de ti, por lo cual los abandonaste en mano de sus enemigos que los dominaron; pero volvían y clamaban otra vez a ti, y tú desde los cielos los oías y según tus misericordias muchas veces los libraste.
Job 9:8. El solo extendió los cielos, Y anda sobre las olas del mar;
Job 11:8. Es más alta que los cielos; ¿qué harás? Es más profunda que el Seol; ¿cómo la conocerás?
Job 12:7. Y en efecto, pregunta ahora a las bestias, y ellas te enseñarán; A las aves de los cielos, y ellas te lo mostrarán;
Job 15:15. He aquí, en sus santos no confía, Y ni aun los cielos son limpios delante de sus ojos;
Job 16:19. Mas he aquí que en los cielos está mi testigo, Y mi testimonio en las alturas.
Job 20:27. Los cielos descubrirán su iniquidad, Y la tierra se levantará contra él.
Job 22:12. ¿No está Dios en la altura de los cielos? Mira lo encumbrado de las estrellas, cuán elevadas están.
Job 26:13. Su espíritu adornó los cielos; Su mano creó la serpiente tortuosa.
Job 28:24. Porque él mira hasta los fines de la tierra, Y ve cuanto hay bajo los cielos.
Job 35:5. Mira a los cielos, y ve,Y considera que las nubes son más altas que tú.
Job 37:3. Debajo de todos los cielos lo dirige, Y su luz hasta los fines de la tierra.
Job 37:18. ¿Extendiste tú con él los cielos, Firmes como un espejo fundido?
Job 37:21. Mas ahora ya no se puede mirar la luz esplendente en los cielos, Luego que pasa el viento y los limpia,
Job 38:32. ¿Sacarás tú a su tiempo las constelaciones de los cielos, O guiarás a la Osa Mayor con sus hijos?
Job 38:33. ¿Supiste tú las ordenanzas de los cielos? ¿Dispondrás tú de su potestad en la tierra?
Job 38:37. ¿Quién puso por cuenta los cielos con sabiduría? Y los odres de los cielos, ¿quién los hace inclinar,
Salmos 2:4. El que mora en los cielos se reirá;El Señor se burlará de ellos.
Salmos 8:1. ¡Oh Jehová, Señor nuestro,Cuán glorioso es tu nombre en toda la tierra!Has puesto tu gloria sobre los cielos;
Salmos 8:3. Cuando veo tus cielos, obra de tus dedos,La luna y las estrellas que tú formaste,
Salmos 8:8. Las aves de los cielos y los peces del mar;Todo cuanto pasa por los senderos del mar.
Salmos 14:2. Jehová miró desde los cielos sobre los hijos de los hombres,Para ver si había algún entendido,Que buscara a Dios.
Salmos 18:9. Inclinó los cielos, y descendió;Y había densas tinieblas debajo de sus pies.
Salmos 18:11. Puso tinieblas por su escondedero, por cortina suya alrededor de sí;Oscuridad de aguas, nubes de los cielos.
Salmos 18:13. Tronó en los cielos Jehová,Y el Altísimo dio su voz;Granizo y carbones de fuego.
Salmos 19:1. Los cielos cuentan la gloria de Dios,Y el firmamento anuncia la obra de sus manos.
Salmos 19:6. De un extremo de los cielos es su salida,Y su curso hasta el término de ellos;Y nada hay que se esconda de su calor.
Salmos 20:6. Ahora conozco que Jehová salva a su ungido;Lo oirá desde sus santos cielosCon la potencia salvadora de su diestra.
Salmos 33:6. Por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos,Y todo el ejército de ellos por el aliento de su boca.
Salmos 33:13. Desde los cielos miró Jehová;Vio a todos los hijos de los hombres;
Salmos 36:5. Jehová, hasta los cielos llega tu misericordia,Y tu fidelidad alcanza hasta las nubes.
Salmos 50:4. Convocará a los cielos de arriba,Y a la tierra, para juzgar a su pueblo.
Salmos 50:6. Y los cielos declararán su justicia,Porque Dios es el juez. Selah
Salmos 53:2. Dios desde los cielos miró sobre los hijos de los hombres,Para ver si había algún entendidoQue buscara a Dios.
Salmos 57:3. El enviará desde los cielos, y me salvaráDe la infamia del que me acosa; SelahDios enviará su misericordia y su verdad.
Salmos 57:5. Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios;Sobre toda la tierra sea tu gloria.
Salmos 57:10. Porque grande es hasta los cielos tu misericordia,Y hasta las nubes tu verdad.
Salmos 57:11. Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios;Sobre toda la tierra sea tu gloria.
Salmos 68:4. Cantad a Dios, cantad salmos a su nombre;Exaltad al que cabalga sobre los cielos.JAH es su nombre; alegraos delante de él.
Salmos 68:8. La tierra tembló;También destilaron los cielos ante la presencia de Dios;Aquel Sinaí tembló delante de Dios, del Dios de Israel.
Salmos 68:33. Al que cabalga sobre los cielos de los cielos, que son desde la antigüedad;He aquí dará su voz, poderosa voz.
Salmos 68:34. Atribuid poder a Dios;Sobre Israel es su magnificencia,Y su poder está en los cielos.
Salmos 69:34. Alábenle los cielos y la tierra,Los mares, y todo lo que se mueve en ellos.
Salmos 73:25. ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti?Y fuera de ti nada deseo en la tierra.
Salmos 76:8. Desde los cielos hiciste oír juicio;La tierra tuvo temor y quedó suspensa
Salmos 77:17. Las nubes echaron inundaciones de aguas;Tronaron los cielos,Y discurrieron tus rayos.
Salmos 78:23. Sin embargo, mandó a las nubes de arriba,Y abrió las puertas de los cielos,
Salmos 78:24. E hizo llover sobre ellos maná para que comiesen,Y les dio trigo de los cielos.
Salmos 79:2. Dieron los cuerpos de tus siervos por comida a las aves de los cielos,La carne de tus santos a las bestias de la tierra.
Salmos 85:11. La verdad brotará de la tierra,Y la justicia mirará desde los cielos.
Salmos 89:2. Porque dije: Para siempre será edificada misericordia;En los cielos mismos afirmarás tu verdad.
Salmos 89:5. Celebrarán los cielos tus maravillas, oh Jehová,Tu verdad también en la congregación de los santos.
Salmos 89:6. Porque ¿quién en los cielos se igualará a Jehová?¿Quién será semejante a Jehová entre los hijos de los potentados?
Salmos 89:11. Tuyos son los cielos, tuya también la tierra;El mundo y su plenitud, tú lo fundaste.
Salmos 89:29. Pondré su descendencia para siempre,Y su trono como los días de los cielos.
Salmos 96:5. Porque todos los dioses de los pueblos son ídolos;Pero Jehová hizo los cielos.
Salmos 96:11. Alégrense los cielos, y gócese la tierra;Brame el mar y su plenitud.
Salmos 97:6. Los cielos anunciaron su justicia,Y todos los pueblos vieron su gloria.
Salmos 102:19. Porque miró desde lo alto de su santuario;Jehová miró desde los cielos a la tierra,
Salmos 102:25. Desde el principio tú fundaste la tierra,Y los cielos son obra de tus manos.
Salmos 103:11. Porque como la altura de los cielos sobre la tierra,Engrandeció su misericordia sobre los que le temen.
Salmos 103:19. Jehová estableció en los cielos su trono,Y su reino domina sobre todos.
Salmos 104:2. El que se cubre de luz como de vestidura,Que extiende los cielos como una cortina,
Salmos 104:12. A sus orillas habitan las aves de los cielos;Cantan entre las ramas.
Salmos 107:26. Suben a los cielos, descienden a los abismos;Sus almas se derriten con el mal.
Salmos 108:4. Porque más grande que los cielos es tu misericordia,Y hasta los cielos tu verdad.
Salmos 108:5. Exaltado seas sobre los cielos, oh Dios,Y sobre toda la tierra sea enaltecida tu gloria.
Salmos 113:4. Excelso sobre todas las naciones es Jehová,Sobre los cielos su gloria.
Salmos 115:3. Nuestro Dios está en los cielos;Todo lo que quiso ha hecho.
Salmos 115:15. Benditos vosotros de Jehová,Que hizo los cielos y la tierra.
Salmos 115:16. Los cielos son los cielos de Jehová;Y ha dado la tierra a los hijos de los hombres.
Salmos 119:89. Para siempre, oh Jehová,Permanece tu palabra en los cielos.
Salmos 121:2. Mi socorro viene de Jehová,Que hizo los cielos y la tierra.
Salmos 123:1. A ti alcé mis ojos,A ti que habitas en los cielos.
Salmos 134:3. Desde Sion te bendiga Jehová,El cual ha hecho los cielos y la tierra.
Salmos 135:6. Todo lo que Jehová quiere, lo hace,En los cielos y en la tierra, en los mares y en todos los abismos.
Salmos 136:5. Al que hizo los cielos con entendimiento,Porque para siempre es su misericordia.
Salmos 136:26. Alabad al Dios de los cielos,Porque para siempre es su misericordia.
Salmos 139:8. Si subiere a los cielos, allí estás tú;Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás.
Salmos 144:5. Oh Jehová, inclina tus cielos y desciende;Toca los montes, y humeen.
Salmos 146:6. El cual hizo los cielos y la tierra,El mar, y todo lo que en ellos hay;Que guarda verdad para siempre,
Salmos 147:8. El es quien cubre de nubes los cielos,El que prepara la lluvia para la tierra,El que hace a los montes producir hierba.
Salmos 148:1. Alabad a Jehová desde los cielos;Alabadle en las alturas.
Salmos 148:4. Alabadle, cielos de los cielos,Y las aguas que están sobre los cielos.
Salmos 148:13. Alaben el nombre de Jehová,Porque sólo su nombre es enaltecido.Su gloria es sobre tierra y cielos.
Proverbios 3:19. Jehová con sabiduría fundó la tierra; Afirmó los cielos con inteligencia.
Proverbios 3:20. Con su ciencia los abismos fueron divididos, Y destilan rocío los cielos.
Proverbios 8:27. Cuando formaba los cielos, allí estaba yo; Cuando trazaba el círculo sobre la faz del abismo;
Proverbios 8:28. Cuando afirmaba los cielos arriba, Cuando afirmaba las fuentes del abismo;
Proverbios 25:3. Para la altura de los cielos, y para la profundidad de la tierra, Y para el corazón de los reyes, no hay investigación.
Isaias 1:2. Oíd, cielos, y escucha tú, tierra; porque habla Jehová: Crié hijos, y los engrandecí, y ellos se rebelaron contra mí.
Isaias 5:30. Y bramará sobre él en aquel día como bramido del mar; entonces mirará hacia la tierra, y he aquí tinieblas de tribulación, y en sus cielos se oscurecerá la luz.
Isaias 13:5. Vienen de lejana tierra, de lo postrero de los cielos, Jehová y los instrumentos de su ira, para destruir toda la tierra.
Isaias 13:10. Por lo cual las estrellas de los cielos y sus luceros no darán su luz; y el sol se oscurecerá al nacer, y la luna no dará su resplandor.
Isaias 13:13. Porque haré estremecer los cielos, y la tierra se moverá de su lugar, en la indignación de Jehová de los ejércitos, y en el día del ardor de su ira.
Isaias 24:21. Acontecerá en aquel día, que Jehová castigará al ejército de los cielos en lo alto, y a los reyes de la tierra sobre la tierra.
Isaias 34:4. Y todo el ejército de los cielos se disolverá, y se enrollarán los cielos como un libro; y caerá todo su ejército, como se cae la hoja de la parra, y como se cae la de la higuera.
Isaias 34:5. Porque en los cielos se embriagará mi espada; he aquí que descenderá sobre Edom en juicio, y sobre el pueblo de mi anatema.
Isaias 37:16. Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, que moras entre los querubines, sólo tú eres Dios de todos los reinos de la tierra; tú hiciste los cielos y la tierra.
Isaias 40:12. ¿Quién midió las aguas con el hueco de su mano y los cielos con su palmo, con tres dedos juntó el polvo de la tierra, y pesó los montes con balanza y con pesas los collados?
Isaias 40:22. El está sentado sobre el círculo de la tierra, cuyos moradores son como langostas; él extiende los cielos como una cortina, los despliega como una tienda para morar.
Isaias 42:5. Así dice Jehová Dios, Creador de los cielos, y el que los despliega; el que extiende la tierra y sus productos; el que da aliento al pueblo que mora sobre ella, y espíritu a los que por ella andan:
Isaias 44:23. Cantad loores, oh cielos, porque Jehová lo hizo; gritad con júbilo, profundidades de la tierra; prorrumpid, montes, en alabanza; bosque, y todo árbol que en él está; porque Jehová redimió a Jacob, y en Israel será glorificado.
Isaias 44:24. Así dice Jehová, tu Redentor, que te formó desde el vientre: Yo Jehová, que lo hago todo, que extiendo solo los cielos, que extiendo la tierra por mí mismo;
Isaias 45:8. Rociad, cielos, de arriba, y las nubes destilen la justicia; ábrase la tierra, y prodúzcanse la salvación y la justicia; háganse brotar juntamente. Yo Jehová lo he creado.
Isaias 45:12. Yo hice la tierra, y creé sobre ella al hombre. Yo, mis manos, extendieron los cielos, y a todo su ejército mandé.
Isaias 45:18. Porque así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que formó la tierra, el que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para que fuese habitada la creó: Yo soy Jehová, y no hay otro.
Isaias 47:13. Te has fatigado en tus muchos consejos. Comparezcan ahora y te defiendan los contempladores de los cielos, los que observan las estrellas, los que cuentan los meses, para pronosticar lo que vendrá sobre ti.
Isaias 48:13. Mi mano fundó también la tierra, y mi mano derecha midió los cielos con el palmo; al llamarlos yo, comparecieron juntamente.
Isaias 49:13. Cantad alabanzas, oh cielos, y alégrate, tierra; y prorrumpid en alabanzas, oh montes; porque Jehová ha consolado a su pueblo, y de sus pobres tendrá misericordia.
Isaias 50:3. Visto de oscuridad los cielos, y hago como cilicio su cubierta.
Isaias 51:6. Alzad a los cielos vuestros ojos, y mirad abajo a la tierra; porque los cielos serán deshechos como humo, y la tierra se envejecerá como ropa de vestir, y de la misma manera perecerán sus moradores; pero mi salvación será para siempre, mi justicia no perecerá.
Isaias 51:13. Y ya te has olvidado de Jehová tu Hacedor, que extendió los cielos y fundó la tierra; y todo el día temiste continuamente del furor del que aflige, cuando se disponía para destruir. ¿Pero en dónde está el furor del que aflige?
Isaias 51:16. Y en tu boca he puesto mis palabras, y con la sombra de mi mano te cubrí, extendiendo los cielos y echando los cimientos de la tierra, y diciendo a Sion: Pueblo mío eres tú.
Isaias 55:9. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.
Isaias 55:10. Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come,
Isaias 64:1. ¡Oh, si rompieses los cielos, y descendieras, y a tu presencia se escurriesen los montes,
Isaias 65:17. Porque he aquí que yo crearé nuevos cielos y nueva tierra; y de lo primero no habrá memoria, ni más vendrá al pensamiento.
Isaias 66:22. Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra que yo hago permanecerán delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra descendencia y vuestro nombre.
Jeremias 2:12. Espantaos, cielos, sobre esto, y horrorizaos; desolaos en gran manera, dijo Jehová.
Jeremias 4:23. Miré a la tierra, y he aquí que estaba asolada y vacía; y a los cielos, y no había en ellos luz.
Jeremias 4:28. Por esto se enlutará la tierra, y los cielos arriba se oscurecerán, porque hablé, lo pensé, y no me arrepentí, ni desistiré de ello.
Jeremias 10:11. Les diréis así: Los dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, desaparezcan de la tierra y de debajo de los cielos.
Jeremias 10:12. El que hizo la tierra con su poder, el que puso en orden el mundo con su saber, y extendió los cielos con su sabiduría;
Jeremias 14:22. ¿Hay entre los ídolos de las naciones quien haga llover? ¿y darán los cielos lluvias? ¿No eres tú, Jehová, nuestro Dios? En ti, pues, esperamos, pues tú hiciste todas estas cosas.
Jeremias 31:37. Así ha dicho Jehová: Si los cielos arriba se pueden medir, y explorarse abajo los fundamentos de la tierra, también yo desecharé toda la descendencia de Israel por todo lo que hicieron, dice Jehová.
Jeremias 51:15. El es el que hizo la tierra con su poder, el que afirmó el mundo con su sabiduría, y extendió los cielos con su inteligencia.
Jeremias 51:16. A su voz se producen tumultos de aguas en los cielos, y hace subir las nubes de lo último de la tierra; él hace relámpagos con la lluvia, y saca el viento de sus depósitos.
Jeremias 51:48. Los cielos y la tierra y todo lo que está en ellos cantarán de gozo sobre Babilonia; porque del norte vendrán contra ella destruidores, dice Jehová.
Lamentaciones 3:41. Levantemos nuestros corazones y manos a Dios en los cielos;
Lamentaciones 3:50. Hasta que Jehová mire y vea desde los cielos;
Lamentaciones 3:66. Persíguelos en tu furor, y quebrántalos de debajo de los cielos, oh Jehová.
Ezequiel 1:1. Aconteció en el año treinta, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando yo en medio de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios.
Ezequiel 32:7. Y cuando te haya extinguido, cubriré los cielos, y haré entenebrecer sus estrellas; el sol cubriré con nublado, y la luna no hará resplandecer su luz.
Daniel 2:28. Pero hay un Dios en los cielos, el cual revela los misterios, y él ha hecho saber al rey Nabucodonosor lo que ha de acontecer en los postreros días. He aquí tu sueño, y las visiones que has tenido en tu cama:
Oseas 2:21. En aquel tiempo responderé, dice Jehová, yo responderé a los cielos, y ellos responderán a la tierra.
Joel 2:10. Delante de él temblará la tierra, se estremecerán los cielos; el sol y la luna se oscurecerán, y las estrellas retraerán su resplandor.
Joel 3:16. Y Jehová rugirá desde Sion, y dará su voz desde Jerusalén, y temblarán los cielos y la tierra; pero Jehová será la esperanza de su pueblo, y la fortaleza de los hijos de Israel.
Jonas 1:9. Y él les respondió: Soy hebreo, y temo a Jehová, Dios de los cielos, que hizo el mar y la tierra.
Habacuc 3:3. Dios vendrá de Temán, Y el Santo desde el monte de Parán. Selah Su gloria cubrió los cielos, Y la tierra se llenó de su alabanza.
Hageo 1:10. Por eso se detuvo de los cielos sobre vosotros la lluvia, y la tierra detuvo sus frutos.
Hageo 2:6. Porque así dice Jehová de los ejércitos: De aquí a poco yo haré temblar los cielos y la tierra, el mar y la tierra seca;
Hageo 2:21. Habla a Zorobabel gobernador de Judá, diciendo: Yo haré temblar los cielos y la tierra;
Zacarias 2:6. Eh, eh, huid de la tierra del norte, dice Jehová, pues por los cuatro vientos de los cielos os esparcí, dice Jehová.
Zacarias 5:9. Alcé luego mis ojos, y miré, y he aquí dos mujeres que salían, y traían viento en sus alas, y tenían alas como de cigüeña, y alzaron el efa entre la tierra y los cielos.
Zacarias 6:5. Y el ángel me respondió y me dijo: Estos son los cuatro vientos de los cielos, que salen después de presentarse delante del Señor de toda la tierra.
Zacarias 8:12. Porque habrá simiente de paz; la vid dará su fruto, y dará su producto la tierra, y los cielos darán su rocío; y haré que el remanente de este pueblo posea todo esto.
Zacarias 12:1. Profecía de la palabra de Jehová acerca de Israel. Jehová, que extiende los cielos y funda la tierra, y forma el espíritu del hombre dentro de él, ha dicho:
Malaquias 3:10. Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros bendición hasta que sobreabunde.
Mateo 3:2. y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
Mateo 3:16. Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él.
Mateo 3:17. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia.
Mateo 4:17. Desde entonces comenzó Jesús a predicar, y a decir: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado.
Mateo 5:3. Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.
Mateo 5:10. Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.
Mateo 5:12. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.
Mateo 5:16. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
Mateo 5:19. De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños, y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; mas cualquiera que los haga y los enseñe, éste será llamado grande en el reino de los cielos.
Mateo 5:20. Porque os digo que si vuestra justicia no fuere mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.
Mateo 5:45. para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.
Mateo 5:48. Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
Mateo 6:1. Guardaos de hacer vuestra justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos; de otra manera no tendréis recompensa de vuestro Padre que está en los cielos.
Mateo 6:9. Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre.
Mateo 7:11. Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre que está en los cielos dará buenas cosas a los que le pidan?
Mateo 7:21. No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.
Mateo 8:11. Y os digo que vendrán muchos del oriente y del occidente, y se sentarán con Abraham e Isaac y Jacob en el reino de los cielos;
Mateo 10:7. Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado.
Mateo 10:32. A cualquiera, pues, que me confiese delante de los hombres, yo también le confesaré delante de mi Padre que está en los cielos.
Mateo 10:33. Y a cualquiera que me niegue delante de los hombres, yo también le negaré delante de mi Padre que está en los cielos.
Mateo 11:11. De cierto os digo: Entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los cielos, mayor es que él.
Mateo 11:12. Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.
Mateo 12:50. Porque todo aquel que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre.
Mateo 13:11. El respondiendo, les dijo: Porque a vosotros os es dado saber los misterios del reino de los cielos; mas a ellos no les es dado.
Mateo 13:24. Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a un hombre que sembró buena semilla en su campo;
Mateo 13:31. Otra parábola les refirió, diciendo: El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo;
Mateo 13:33. Otra parábola les dijo: El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.
Mateo 13:44. Además, el reino de los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo, el cual un hombre halla, y lo esconde de nuevo; y gozoso por ello va y vende todo lo que tiene, y compra aquel campo.
Mateo 13:45. También el reino de los cielos es semejante a un mercader que busca buenas perlas,
Mateo 13:47. Asimismo el reino de los cielos es semejante a una red, que echada en el mar, recoge de toda clase de peces;
Mateo 13:52. El les dijo: Por eso todo escriba docto en el reino de los cielos es semejante a un padre de familia, que saca de su tesoro cosas nuevas y cosas viejas.
Mateo 16:17. Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos.
Mateo 16:19. Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos.
Mateo 18:1. En aquel tiempo los discípulos vinieron a Jesús, diciendo: ¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?
Mateo 18:3. y dijo: De cierto os digo, que si no os volvéis y os hacéis como niños, no entraréis en el reino de los cielos.
Mateo 18:4. Así que, cualquiera que se humille como este niño, ése es el mayor en el reino de los cielos.
Mateo 18:10. Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos.
Mateo 18:14. Así, no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños.
Mateo 18:19. Otra vez os digo, que si dos de vosotros se pusieren de acuerdo en la tierra acerca de cualquiera cosa que pidieren, les será hecho por mi Padre que está en los cielos.
Mateo 18:23. Por lo cual el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos.
Mateo 19:12. Pues hay eunucos que nacieron así del vientre de su madre, y hay eunucos que son hechos eunucos por los hombres, y hay eunucos que a sí mismos se hicieron eunucos por causa del reino de los cielos. El que sea capaz de recibir esto, que lo reciba.
Mateo 19:14. Pero Jesús dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de los cielos.
Mateo 19:23. Entonces Jesús dijo a sus discípulos: De cierto os digo, que difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos.
Mateo 20:1. Porque el reino de los cielos es semejante a un hombre, padre de familia, que salió por la mañana a contratar obreros para su viña.
Mateo 22:2. El reino de los cielos es semejante a un rey que hizo fiesta de bodas a su hijo;
Mateo 23:9. Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es vuestro Padre, el que está en los cielos.
Mateo 23:13. Mas ¡ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque cerráis el reino de los cielos delante de los hombres; pues ni entráis vosotros, ni dejáis entrar a los que están entrando.
Mateo 24:29. E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas.
Mateo 24:36. Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre.
Mateo 25:1. Entonces el reino de los cielos será semejante a diez vírgenes que tomando sus lámparas, salieron a recibir al esposo.
Mateo 25:14. Porque el reino de los cielos es como un hombre que yéndose lejos, llamó a sus siervos y les entregó sus bienes.
Marcos 1:10. Y luego, cuando subía del agua, vio abrirse los cielos, y al Espíritu como paloma que descendía sobre él.
Marcos 1:11. Y vino una voz de los cielos que decía: Tú eres mi Hijo amado; en ti tengo complacencia.
Marcos 11:25. Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.
Marcos 11:26. Porque si vosotros no perdonáis, tampoco vuestro Padre que está en los cielos os perdonará vuestras ofensas.
Marcos 12:25. Porque cuando resuciten de los muertos, ni se casarán ni se darán en casamiento, sino serán como los ángeles que están en los cielos.
Marcos 13:25. y las estrellas caerán del cielo, y las potencias que están en los cielos serán conmovidas.
Lucas 6:23. Gozaos en aquel día, y alegraos, porque he aquí vuestro galardón es grande en los cielos; porque así hacían sus padres con los profetas.
Lucas 9:58. Y le dijo Jesús: Las zorras tienen guaridas, y las aves de los cielos nidos; mas el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza.
Lucas 10:15. Y tú, Capernaum, que hasta los cielos eres levantada, hasta el Hades serás abatida.
Lucas 10:20. Pero no os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos.
Lucas 11:2. Y les dijo: Cuando oréis, decid: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
Lucas 12:33. Vended lo que poseéis, y dad limosna; haceos bolsas que no se envejezcan, tesoro en los cielos que no se agote, donde ladrón no llega, ni polilla destruye.
Lucas 21:26. desfalleciendo los hombres por el temor y la expectación de las cosas que sobrevendrán en la tierra; porque las potencias de los cielos serán conmovidas.
Hechos 2:34. Porque David no subió a los cielos; pero él mismo dice: Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi diestra,
Hechos 7:56. y dijo: He aquí, veo los cielos abiertos, y al Hijo del Hombre que está a la diestra de Dios.
2 Corintios 5:1. Porque sabemos que si nuestra morada terrestre, este tabernáculo, se deshiciere, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha de manos, eterna, en los cielos.
Efesios 1:10. de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.
Efesios 3:15. de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra,
Efesios 4:10. El que descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo.
Efesios 6:9. Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas, sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para él no hay acepción de personas.
Filipenses 2:10. para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra;
Filipenses 3:20. Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo;
Colosenses 1:5. a causa de la esperanza que os está guardada en los cielos, de la cual ya habéis oído por la palabra verdadera del evangelio,
Colosenses 1:16. Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él.
Colosenses 1:20. y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz.
Colosenses 4:1. Amos, haced lo que es justo y recto con vuestros siervos, sabiendo que también vosotros tenéis un Amo en los cielos.
1 Tesalonicenses 1:10. y esperar de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira venidera.
Hebreos 1:10. Y: Tú, oh Señor, en el principio fundaste la tierra, Y los cielos son obra de tus manos.
Hebreos 4:14. Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que traspasó los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra profesión.
Hebreos 7:26. Porque tal sumo sacerdote nos convenía: santo, inocente, sin mancha, apartado de los pecadores, y hecho más sublime que los cielos;
Hebreos 8:1. Ahora bien, el punto principal de lo que venimos diciendo es que tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos,
Hebreos 10:34. Porque de los presos también os compadecisteis, y el despojo de vuestros bienes sufristeis con gozo, sabiendo que tenéis en vosotros una mejor y perdurable herencia en los cielos.
Hebreos 12:23. a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los justos hechos perfectos,
Hebreos 12:25. Mirad que no desechéis al que habla. Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la tierra, mucho menos nosotros, si desecháremos al que amonesta desde los cielos.
1 Pedro 1:4. para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,
2 Pedro 3:5. Estos ignoran voluntariamente, que en el tiempo antiguo fueron hechos por la palabra de Dios los cielos, y también la tierra, que proviene del agua y por el agua subsiste,
2 Pedro 3:7. pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos.
2 Pedro 3:10. Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas.
2 Pedro 3:12. esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán!
2 Pedro 3:13. Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia.
Apocalipsis 12:12. Por lo cual alegraos, cielos, y los que moráis en ellos. ¡Ay de los moradores de la tierra y del mar! porque el diablo ha descendido a vosotros con gran ira, sabiendo que tiene poco tiempo.